Domingo de sol y agradable mañana la que hemos pasado, viendo la obra de Teloncillo «La cocina».
Donde se guisan sopas de letras, donde las especias bailan y los quesos cantan.
Un lugar donde las miradas de los más peques están fijas en este escenario, que envuelve nuestro día a día, para jugar y echar a volar nuestra imaginación.
¡ Fantástica obra !
Como siempre un encanto volver a veros.
Todo un placer.